Somos lo que comemos, es algo muy cierto. Pero ¿Te has puesto a pensar qué porcentaje de carbohidratos y proteínas consumes a diario?
Los alimentos que consumimos son la fuente que permite que nuestro cuerpo se mueva y nuestros órganos internos se mantengan en excelente estado, por lo general una persona promedio basa su dieta diaria en un 50% de carbohidratos, 40% de grasas y 10% de proteínas cuando nuestra ingesta debería ser diferente.
En la web de obesidad.net se encuentran una serie de consejos que nos pueden ayudar a mantener una alimentación equilibrada que nos permita estar en el peso adecuado y evitarnos problemas en un futuro del corazón, espalda y huesos.
- Aumenta la ingesta de: cereales, fruta, verduras, legumbres, granos, tortilla y pan.
- Come con moderación: carne magra de pollo (sin piel), de ternera, pescado, clara de huevo, leche y derivados.
- Consume en pequeñas cantidades: mantequilla, margarina, aceites, dulces, aderezos, azúcar, chocolates, yema de huevo y refrescos.
- No olvides tomar agua. Tu cuerpo requiere consumir entre 1.5 y 2 litros de agua por día.
- Consume más fibra, la encuentras en verduras, leguminosas, frutas, nueces semillas, granos y panes integrales, ella te ayudará a mejorar el funcionamiento del aparato digestivo, las evacuaciones intestinales, previene el estreñimiento y la aparición de hemorroides y el cáncer intestinal.
- Disminuye el consumo de azúcar, aunque nos proporciona energía en forma de carbohidratos simples, no tiene ningún efecto nutritivo (proporciona 4 calorías por gramo). En pequeñas cantidades, mejora el sabor y la textura de los alimentos, pero no debemos excedernos.
Recuerda que la mayoría de los productos envasados o enlatados utilizan el azúcar como conservador.
Cuidar lo que comes te asegurará una buena calidad de vida.
¡Buen Provecho!