Por Maya H.
Desde que tengo mi blog y asisto frecuentemente a eventos relacionados con la moda, estoy muy al tanto de las nuevas tendencias, colores y diseños que vienen temporada tras temporada. Sin embargo vestir los colores y las prendas no es algo que me quite el sueño, cosa que antes de conocer este mundo, si me preocupaba bastante.
Recuerdo muy bien que en la prepa la ropa de Bershka era el “must have”, cabe mencionar que la preparatoria a la que asistí era muy grande por lo tanto dicha tienda tenia bastantes clientas, tanto así que parecíamos uniformadas, en invierno todas vestíamos chamarras de este lugar aunque solo había como 5 modelos y no sé si se acuerdan de una blusa que venia en varios colores con un dragón atrás, recuerdo que todas teníamos exactamente esa blusa!.
Fui muy feliz en esas épocas, pero también en algunos momentos llegué a frustrarme por no tener la nueva chamarra de esta tienda, y esto no sucedió porque mis papas no me la quisieran comprar, esto pasaba por que ya no había más chamarras!, y claro terminaba frustrada porque no andaba vestida como las demás.
Hoy por hoy me he dado cuenta de que la frase “estar a la moda” es un dicho que podríamos considerar subjetivo, porque realmente lo que me ha enseñado la moda es que el estilo es lo que te hace sobresalir de los demás.
Cuando voy en busca de nuevos estilos puedes captar un patrón en la forma de vestir en las personas, usan ciertos colores, marcas y accesorios, pero lo que me hace elegir a una persona es la forma en la que destaca, más que una cazadora de tendencias, me considero una de estilos. Lo curioso de esto es que cuando inicie mi blog no tenía idea de que era lo que buscaba y ahora lo tengo muy claro.
Antes de estar en constante contacto con la moda se podría decir que yo era inmadura en cuestión de estilo, ya que me dedicaba más a seguir la moda que a proponerla.
La moraleja de esto es que no debemos tener miedo a sobresalir, por el contrario debemos buscar expresarnos con la moda y marcar nuestro propio estilo, sin duda a más de una persona no le guste tu ropa, pero es a nosotros mismo a quien debemos buscar agradar y sobre todo la seguridad y el porte que tenemos al momento de usar las prendas es lo que le da vida al outfit perfecto.